Como redactora web hace tiempo que pienso en esta curiosa relación. Es más, cuando me enfrento a un trabajo nuevo tengo la agradable sensación de sentirme como una artista. Seguramente pensarás: “está de broma”. Querido lector, déjame que te explique.

Tanto el actor como el redactor web deben ponerse en la piel del protagonista. Porque si el actor tiene que saber interpretar los sentimientos, el redactor web debe saber expresar las ideas. Ambos cuentan con una herramienta poderosa: las palabras, y si el actor habla, se mueve, actúa y gesticula, el redactor cuenta con imágenes, vídeos, enlaces… lo que necesite y considere adecuado para enriquecer el contenido.

Cada nuevo proyecto es un reto que empieza por observar, escuchar y tratar de conocer a la persona que hay detrás, y leer e investigar sobre el tema que trabajará con la intención de captar y comprender los valores y los deseos del cliente para plasmarlos por escrito.

Al igual que el actor, el redactor web tiene que entusiasmar y convencer al público para ganar su reconocimiento. Sin la menor duda, podrá conseguirlo si entre sus cualidades figuran, en especial, las siguientes.

CUALIDADES DE UN REDACTOR WEB

–Saber escuchar / observar / preguntar

-La empatía

-La creatividad

-La curiosidad

-Ser un comunicador persuasivo (copywriter)

-El conocimiento del lenguaje y del medio (Internet)

-La pasión por ayudar a los demás a expresarse

¿Crees que se puede crear buen contenido sin un redactor web con estas habilidades? ¿Qué otras cualidades consideras que debe tener un redactor web?

¡Me interesa mucho tu opinión!