Tengo una opinión y quizás tú también la compartas: el informe más creíble es el que uno mismo vive a diario. Ya pueden decirte y repetirte una y mil veces lo mismo que hasta que no lo experimentas en tu propia piel muchas veces no acabas de creértelo o piensas que no es para tanto.
Te cuento esto porque justo antes y después de empezar un año nuevo aparecen informes y artículos que explican las tendencias durante los próximos 12 meses. 2016 no ha sido diferente y varios artículos coinciden en algo que viene afianzándose año tras año con fuerza: el marketing de contenidos.
Aquí puedes leer uno de estos artículos.
Quizás has leído este o algún otro post donde nombran esta tendencia, pero tú no acabas de verlo claro y no sabes hasta qué punto el marketing de contenidos puede ayudar a tu negocio, así que voy a mostrártelo a través de tu propia experiencia.
Seguramente sigues a profesionales y marcas en Facebook, Twitter, Linkedin, etc. y estás suscrito a su blog, canal de Youtube, podcasts, etc. Te parece útil lo que cuentan porque descubres cosas nuevas, te explican otras, te sientes identificado con sus valores o tienen la última novedad sobre ese tema que tanto te interesa, te divierte, te motiva, etc. Se trata de un tipo de contenido que esperas con ilusión y que siempre encuentras un hueco para leerlo porque sabes que te aportará algo y esto es precisamente lo que lo convierte en un contenido de valor para ti.
Este profesional o marca poco a poco y contenido tras contenido va creando una relación de confianza contigo. Estoy convencida de que si algún día necesitases sus servicios o productos lo escogerías a él, por ese engagement que se ha ido generando, o lo tendrías en cuenta como un candidato preferente. Mientras que otras marcas o profesionales ni se te pasarían por la cabeza. Y ¿sabes por qué? Hay dos opciones:
1ª. Porque No son visibles. Por lo tanto, no existen para ti.
2ª. Porque aun y siendo visibles pasan desapercibidos por una razón: NO transmiten cuál es su propuesta de valor.
Y ahora te pregunto:
¿Crees que puedes construir una relación con otra persona sin comunicación? ¿Piensas que es posible ofrecer contenido de valor sin una estrategia de contenidos pensada por y para tu público? ¿Piensas que puedes posicionarte en la mente de tu cliente ideal sin trabajar tu marca personal/corporativa?
Mi respuesta es que NO.
Continúo preguntándote:
¿Quieres crear un vínculo especial con tu cliente ideal? ¿Quieres que se cumplan tus objetivos de visibilidad, reputación y credibilidad? ¿Buscas inspirar confianza? ¿Quieres diferenciarte de la competencia? ¿Deseas que te elijan a ti?
Entonces el marketing de contenidos es la mejor decisión para que esto suceda, pero ¡ojo! no siempre todo sirve para todos. Con esto quiero decirte que tengas muy claros tus objetivos y las características de tu negocio para saber si esta es la técnica más adecuada. Además, ten en cuenta que necesitas invertir tiempo, dedicación y dinero (si vas a contratar este servicio) para obtener resultados a medio y largo plazo.
Y si crees que sí, el primer paso fundamental es (1) conocer a tu cliente y a continuación, ponerse en sus zapatos. Me gusta este refrán porque se refiere a una capacidad que nunca puede faltarte: la empatía. Solo de esta forma tu estrategia de contenidos tendrá éxito.
(2) El siguiente paso es la preparación de una estrategia de contenidos.
(3) A continuación, la creación de contenido, por ejemplo: posts para tu blog, vídeos, infografías, etc.
(4) Después debes compartirlo en las redes sociales.
(5) La medición es el siguiente paso esencial que debes implementar para comprobar qué resultados obtiene tu trabajo, así como el comportamiento del público, y poder tomar decisiones.
Que la Estrategia, el Contenido y la Planificación te acompañen. Clic para tuitearSi necesitas ayuda o asesoramiento, solo tienes que decírmelo y nos pondremos manos a la obra.
También puedes dejar tu opinión o comentarme cualquier duda en los comentarios del blog.
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